viernes, 24 de enero de 2014
jueves, 23 de enero de 2014
Identificada la proteína que conecta el estrés con la depresión
Aunque se sabe que el estrés crónico puede llegar a producir depresión, los mecanismos que regulan esta relación no están del todo claros. Ahora, una nueva investigación que se publica en la revista PNAS ha identificado una proteína que tiene mucho que decir en este proceso.
Cuando nos encontramos en situaciones de estrés, nuestro organismo produce mayores cantidades de cortisol, una hormona que, si bien a pequeñas dosis tiene efectos positivos, puede actuar de forma negativa sobre nuestro cerebro cuando el estrés se hace crónico. Una de las consecuencias es la activación de los receptores de los glucocorticoides, que provocan a su vez la disminución en la producción de neuronas en el hipocampo, un efecto que se ha observado en pacientes afectados de depresión. La nueva investigación, realizada por científicos del King College de Londres con modelos celulares y animales, ha revelado el papel de la proteína SGK1 como mediadora en estos procesos. Para ello, esta molécula mantiene activos los receptores de los glucocorticoides y, además, disminuye la formación de nuevas células en una región del hipocampo que se relaciona con la regulación del estado de ánimo.
Por otro lado, los resultados revelan que, al bloquear la proteína SGK1, los efectos del estrés sobre la producción de neuronas disminuyen, por lo que se abre una nueva vía para desarrollar tratamientos antidepresivos. “Puesto que la reducción en la neurogénesis es una parte del proceso que conduce a la depresión, es importante identificar las rutas moleculares mediadoras en estos mecanismos”, ha explicado Christoph Anacker, uno de los autores. “Los fármacos diseñados para reducir los niveles de SGK1 en pacientes deprimidos podrían ser, por tanto, una prometedora estrategia para los futuros tratamientos antidepresivos”, ha concluido.
Cuando nos encontramos en situaciones de estrés, nuestro organismo produce mayores cantidades de cortisol, una hormona que, si bien a pequeñas dosis tiene efectos positivos, puede actuar de forma negativa sobre nuestro cerebro cuando el estrés se hace crónico. Una de las consecuencias es la activación de los receptores de los glucocorticoides, que provocan a su vez la disminución en la producción de neuronas en el hipocampo, un efecto que se ha observado en pacientes afectados de depresión. La nueva investigación, realizada por científicos del King College de Londres con modelos celulares y animales, ha revelado el papel de la proteína SGK1 como mediadora en estos procesos. Para ello, esta molécula mantiene activos los receptores de los glucocorticoides y, además, disminuye la formación de nuevas células en una región del hipocampo que se relaciona con la regulación del estado de ánimo.
Por otro lado, los resultados revelan que, al bloquear la proteína SGK1, los efectos del estrés sobre la producción de neuronas disminuyen, por lo que se abre una nueva vía para desarrollar tratamientos antidepresivos. “Puesto que la reducción en la neurogénesis es una parte del proceso que conduce a la depresión, es importante identificar las rutas moleculares mediadoras en estos mecanismos”, ha explicado Christoph Anacker, uno de los autores. “Los fármacos diseñados para reducir los niveles de SGK1 en pacientes deprimidos podrían ser, por tanto, una prometedora estrategia para los futuros tratamientos antidepresivos”, ha concluido.
¿Qué animal duerme más un gato, un perro, una paloma o una foca?
Ratón: 20,1 horas
Perezoso: 20 horas
Zarigüeya: 19,4 horas
Musaraña : 16 horas
Ardilla : 14 horas
Gato : 13,2 horas
León : 13 horas
Paloma: 11,9 horas
Delfín: 10 horas
Chimpancé: 10,8 horas
Perro: 10,7 horas
Mosca del vinagre: 10 horas
Hombre: 8 horas
Cerdo: 8,4 horas
Foca : 6 horas
Elefante asiático: 5,3 horas
Vaca: 5 horas
Oveja: 4 horas
Caballo: 2,9 horas
Perezoso: 20 horas
Zarigüeya: 19,4 horas
Musaraña : 16 horas
Ardilla : 14 horas
Gato : 13,2 horas
León : 13 horas
Paloma: 11,9 horas
Delfín: 10 horas
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Perro: 10,7 horas
Mosca del vinagre: 10 horas
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Elefante asiático: 5,3 horas
Vaca: 5 horas
Oveja: 4 horas
Caballo: 2,9 horas
Descubren vapor de agua en un planeta del cinturón de asteroides
El descubrimiento de agua en otros planetas es de suma importancia para la ciencia y la exploración de otros mundos pues se asocia a la posible existencia de vida fuera de nuestro planeta. Gracias al observatorio espacial Herschel de la ESA se ha encontrado por primera vez vapor de agua en un objeto del cinturón de asteroides, el planeta enano Ceres.
Tan solo tiene un diámetro de 950 kilómetros y sin embargo es el mayor objeto del cinturón de asteroides, situado entre las órbitas de Júpiter y Marte. Además, este pequeño planeta, a diferencia de la mayoría de asteroides es prácticamente esférico. Todas estas particularidades hacen de Ceres un planeta muy especial y especialmente estudiado por los astrónomos.
Ahora acaban de detectar vapor de agua en su atmósfera y hielo en su superficie. Como explica el autor principal del artículo aparecido en Nature, Michael Küppers, del Centro Europeo de Astronomía Espacial de la ESA en Madrid, “es la primera vez que se detecta agua en el cinturón de asteroides, y confirma que Ceres presenta una superficie de hielo y una atmósfera”.
De hecho, según han podido comprobar los científicos, prácticamente todo el vapor procede únicamente de dos puntos de su superficie. Los cálculos de los investigadores les hacen pensar que se están produciendo unos 6 kg de vapor de agua por segundo, lo que significaría que sólo una pequeña fracción de Ceres está cubierta de hielo. A este respecto Laurence O’Rourke, coautor del artículo, apunta que “esta hipótesis encaja perfectamente con las dos regiones puntuales que hemos observado”.
Estos dos puntos de emisión de vapor son un 5% más oscuras que el resto de la superficie, lo que significa que absorben más luz solar y deberían ser más cálidas. Este hecho favorecería el fenómeno de sublimación del agua (el paso del estado sólido del agua directamente a gas), al igual que ocurre en los cometas.
“El descubrimiento de Herschel nos aporta nuevos datos sobre la distribución de agua en el Sistema Solar. Como Ceres constituye aproximadamente la quinta parte de la masa total del cinturón de asteroides, este descubrimiento no sólo es importante para el estudio de los cuerpos más pequeños del Sistema Solar, sino que también nos ayuda a comprender mejor el origen del agua en nuestro planeta”, explica Göran Pilbratt, Científico del Proyecto Herschel para la ESA.
En 2015 está previsto que la misión Dawn de la NASA llegue a Ceres para estudiar su superficie y observar in situ cómo se producen y evolucionan las emisiones de vapor de agua.
miércoles, 15 de enero de 2014
martes, 14 de enero de 2014
domingo, 12 de enero de 2014
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